La Llanura

Paisaje agrícola

La Llanura y los prados de siega

Cassà se sitúa en el punto preciso donde las Gavarres se abren hacia la llanura de la Selva. Esta llanura se extiende a más de 35.000 ha, enmarcada entre las Gavarres en el este, el macizo de Ardenya i Cadiretes al sur, y las montañas de las Guilleries y el Rocacorba al oeste y al norte. Es un territorio de ondulaciones suaves, donde predomina un paisaje agroforestal caracterizado por cultivos de cereales, forrajes y maíz, con sectores de bosque de encinas, corchos y pinos. Presenta también numerosas rieras y ríos, que ofrecen un hábitat de ribera muy rico, además de diversas áreas endorreicas que dan lugar a zonas húmedas e inundables, representadas en Cassà en varios puntos del municipio. Se trata de un paisaje amable y llano, que ofrece panorámicas magníficas, ideal para descubrirlo ya sea a pie o en bicicleta. Es también el hábitat de biodiversidad propia de los espacios abiertos, especialmente pájaros.

En este entorno natural todavía poco conocido pero de gran belleza, se encuentra un gran patrimonio tanto natural como histórico y arquitectónico. En Cassà, la llanura, que conserva un carácter marcadamente agrícola, cuenta con multitud de masías y casas de payés, muchas de ellas de origen medieval. Algunas de las más interesantes pueden ser Can Dalmau, de época moderna, Mas Bassó, documentado ya en el siglo XI, u otras como Can Oller, Can Frigola, Can Gruart, etc., todas ellas catalogadas como Bien Cultural de Interés Local. También se conservan dos ermitas rurales que atestiguan la gran vivacidad que han tenido y tienen estos parajes para la vida de Cassà de la Selva. En el vecindario de Sangosta se sitúa la masía y la capilla del Remei, del siglo XVII-XVIII, que conserva un fresco del artista local Benet Casabó. En el vecindario de Esclet se sitúa la ermita de San Vicente de Esclet, donde en enero se celebra un encuentro popular en honor de este santo.

En el mismo vecindario de Esclet se pueden encontrar también los llamados prados de siega de Esclet. Los prados de siega son prados seminaturales de los que se extrae forraje, y que en épocas de lluvias pueden quedar inundados formando pequeños estanques. Si bien la mayoría de estos espacios se han drenado y desecado, en Esclet se pudo llegar a un acuerdo de custodia con la propiedad de los terrenos, que ha permitido conservar un espacio natural único que ofrece un hábitat inigualable para numerosas especies de plantas, pero también de anfibios y pájaros. Estos prados son un ejemplo inmejorable del rico patrimonio natural de estos amenazados espacios abiertos.

Igualmente, en la llanura de la Selva había históricamente varios lagos y estanques. En concreto, en Cassà existía el antiguo estanque de Mosqueroles. Este gran lago se encontraba en el vecindario del mismo nombre, junto a la riera Gotarra, y se alimentaba de las crecidas periódicas de las rieras y torrentes que atraviesan las suaves pendientes de la llanura. El lago fue desecado ya en la edad media para ganar tierras de cultivo. Hoy en día todavía se puede visitar un canal de drenaje del siglo XV, por donde las aguas del antiguo estanque desguazan en la riera Gotarra.

Volviendo de Sant Vicenç, hacia el núcleo de Cassà encontramos también la Pineda Fosca, un espacio natural de recreo muy apreciado por los cassanenses, especialmente en los meses de verano, cuando ofrece un refugio contra el calor. Muy cerca del pinar, junto al mas Torremansa podemos encontrar los campos donde durante la Guerra Civil se instaló el aeródromo de Cassà. Este aeródromo fue uno de los muchos que durante la guerra se crearon en el entorno de Girona para proteger el territorio de los bombardeos de la aviación fascista. En concreto, el de Cassà disponía de dos pistas de más de 200 metros de ancho cada una. Hoy, del aeródromo queda el paisaje llano que se alarga entre la Pineda Fosca y la masía Torremansa, además de varias construcciones, como la conocida como casa de los aviadores, que pudo servir como de torre de control, y un refugio.

Todo ello se podrá descubrir tanto a pie como en bicicleta de los itinerarios que se proponen desde el municipio aquí.

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Les Gavarres

Cassà de la Selva es una puerta de entrada excepcional al espacio natural de Les Gavarres, espacio natural protegido.
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Can Vilallonga

En el corazón del Espacio Natural de las Gavarres, al pie del macizo y dentro del término municipal de Cassà, se encuentra la finca.
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Vies Verdes y Pirinexus

El pueblo de Cassà se ha convertido en los últimos años en un punto central de la red de vías verdes gerundenses.
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© Cassà Destapa els Sentits